domingo, 21 de septiembre de 2014

Cantinflas



Título: Cantinflas
País: México
Año: 2014
Actúan: Óscar Jaenada, Joaquín Cosío, Luis Gerardo Méndez, Gabriela de la Garza
Dirige: Sebastián del Amo
Guión: Edui Tijerina, Sebastián del Amo
Fotografía: Carlos Hidalgo
Duración: 106 min.

La película inicia dándonos una idea de cómo estaba la industria hollywoodense del momento, súper producciones justo después de la segunda guerra mundial.

Cuenta el ascenso de la figura de Cantinflas de forma paralela a su “inesperada” participación en La vuelta al mundo en ochenta días (1956), tal vez de manera demasiado rápida, nos muestra sólo la superficie de uno de los personajes más emblemáticos de la historia mexicana.

La interpretación de Óscar Jaenada es notable, logra una mímesis pocas veces vista, dejándonos ver la atormentada relación que tuvo Mario Moreno con el personaje que nunca (para bien o para mal) lo dejó.

También de manera ligera aparecen sus sinsabores personales, y su obsesión por el control tanto en su trabajo como en su vida personal, su participación contra la mafia de los sindicatos y su breve participación como presidente de la ANDA para impulsar no tanto el cine mexicano, sino SU cine mexicano.

Y para finalizar, la producción que le dio fama mundial (aunque aún daría mucho más en territorio mexicano e hispanoparlante, ya que el lenguaje extranjero no jugaría mucho a su favor con el cantinfleo).

 Todo esto contado de forma contenida y conservadora, posiblemente hubiera sido bueno explorar de forma profunda la vida de este visionario artista, la figura de Cantinflas lo merece, pero definitivamente esta cinta ayudará a que los más jóvenes se interesen en su vasta filmografía.




Sígueme en Twitter en: @jlgr10

viernes, 19 de septiembre de 2014

MÁS ALLÁ DEL ROPERO DE NARNIA...

Por Heleodoro Lozano Macías...



Aún recuerdo las pequeñas historias que mi maestra de catecismo me contaba cada sábado en la mañana para que entendiera mejor los incomprensibles relatos de la bíblicos ya que era yo un mozalbete de 8 años. Esas historias trataban de asemejarse lo más posible al tema. Hasta la fecha de hoy recuerdo mejor el cuento de Pedro y el Lobo que la cita bíblica de ese día. Clives Staple Lewis sabía muy bien la dinámica de esa pedagogía, él deseaba que sus hijos se adentraran al misterioro amor que encierra los Los Escritor Bíblicos. C. S. Lewis después de 60 años aún nos sigue enseñando con símbolos un misterio que va más allá de este mundo. Una magia más profunda que las simples imágenes de un León, la Bruja y un Ropero (2005). El escritor británico declaró que con la heptalogía de Narnia deseaba educar a sus hijos sobre el Evangelio de Jesucristo.

La lucha entre el bien y el mal que lleva más de cien años en el lejano mundo de Narnia es nuestro punto de discusión. Todo inicia con la invitación a adentrarnos a un Armario. Un Ropero donde todo tiene cabida, aquí es necesario hacer una lectura hermenéutica con relación a la Iglesia. Pero antes de continuar te invito a que tengas apertura a la multiplicidad de los sentidos. Esta película al mismo tiempo está llena de un trasfondo de las filosofía platónica y de la cultura Europea de los estragos de la segunda guerra mundial.

La alegoría de la Redención Cristiana que en esta historia se nos presenta, es una invitación a evaluar críticamente nuestra Fe. La bruja Jadis se presenta como una belleza que engaña y convence al igual que en el meta-relato del Génesis, donde la serpiente habla y seduce a Adán y Eva a desobedecer. El magnífico encuentro de horizontes de la Biblia y Lewis da Origen a representar perceptiblemente la idea. La función simbólica en esta historia es darnos a conocer la salvación de toda la creación, poer ello el gran mosaico de animales y criaturas dentro de ella. Toda la tierra de Narnia se ha salvado gracias al sacrificio de Aslan. Lewis hace aquí una reflexión llena de lucidez sobre la muerte del León que nos permite pensar en el amor de Dios para perdonar a los pecadores y así restaurar la relación con toda la creación. Hasta una buena clase de Ecología hemos recibido. La función simbólica en esta historia es poder descubrir el vínculo del ser humano con lo que para él es sagrado. Cuando esto sucede el invierno va desapareciendo poco a cpoco, es porque la esperanza debilita a la maldad. La esperanza que Aslan da, el gran León, nos proviene de una antigua profecía al igual que en el Antiguo Testamento en relación con el Nuevo. Los elementos son una mesa de piedra y de cambiar la vida del Santo por la de un hijo perdido.

El vínculo convencional que el literato utiliza son elementos básicos de la Redención, el Perdón y el Amor: éstos son algunos de los valores fundamentales en el alma humana. La hermandad, la honestidad, la amistad y el sacrificio son los pilares de la historia. Para nosotros los creyentes nace ahora una pregunta: ¿Es fantasía o inspiración? A lo que puedo responder hay una gran interpretación creativa de su idea fundamental. En el momento que se nos representa que la vida del injusto será cambiada por el Justo, estamos hablando del origen de una semejanza real a lo que reconocemos como Sacrificio, similar como el que Jesucristo tuvo en la Cruz. Al final de la película nos muestran que los pequeños y desvalidos tienen la vistoria al igual que el mensaje de las bienaventuranzas. Se sucesivamente la reconstrucción de Narnia después del Sacrificio.

Al igual que el Génesis y al Apocalipsis recopilan datos históricos que nos abren al panorama simbólico para que lo leamos desde nuestra vida, la película de Andrew Adamson está incompleta hasta que lo veamos desde nuestra propia realidad. Haciendo un fondo más realista y más personal, llamados a un compromiso.

La pregunta de la pequeña Lucy: ¿Por qué esta noche es diferente? Es un punto de semejanza con la predecesora película de Mel Gibson de La pasión (2004), donde la penitente de Magdalena le hizo esa misma pregunta a María. Hasta la música en el momento del sacrificio es fácil de reconocer la afinidad entre estas dos películas. Acaso, ¿será que nos quiere dejar claro el mensaje?

Cuando la piedra se rompe empieza una nueva creación, aparece el Gran León revestido de Gloria, ya que momentos antes había sido despojado de su melena y de su vida. La muerte se ha invertido. La víctima inocente, reivindica a todos con el aliento de vida. Al igual que en el relato de la creación.

Las mujeres lloran la muerte del Justo y a la mañana siguiente son las primeras en recibir la noticia de su regreso, otra vez, es el mismo elemento que se nos relata en los Evangelios Cristianos. Aslan que es el que ha vencido a la muerte tiene ahora el poder de dar la vida. De librar a todos los estragos del Mal. Cuando vence el mal inicia todo otra vez. Y si aún sigue fuera de todo este relato, te invito a que reflexiones lo que al inicio de la película Edmund nos dice: "Las guerras no duran para siempre" es una exhortación muy propia a nuestros días, independientemente si crees o no crees en un Dios.

Los hermanos Pevensive nos enseñan que la Justicia, la Grandeza, la Valentía, la Bondad y la Sabiduría son las coronas de la recompensas por quienes luchan en favor del bien contra el mal. Ahora hasta nos preguntan, ¿quién es un héroe verdadero?, tan a la moda que está dicho tema en las carteleras de cine. Algo fácil de reconocer es que Edmund, Peter, Susan y Lucy nos llevan a un mundo lleno de fantasía y símbolos. No podemos negar el lugar de la semiótica en esta historia. Es por ello que me he lanzado a la aventura de hacer este escrito. A tratar de unir el símbolo con su sacrificio. La idea original del novelista estaba siempre ligada a algo más allá de la simple realidad. 

Vamos no te quedes fuera del Ropero y atrévete a entrar!

sábado, 13 de septiembre de 2014

Obediencia Perfecta



El día de hoy me di el tiempo de ver esta película mexicana, que sin duda toca uno de los temas más polémicos dentro de nuestra sociedad mexicana, la creación e inicio de “Los Legionarios de Cristo”, orden que fue fundada por el sacerdote Marcial Maciel hace ya bastantes años.

Quien se dé el tiempo de ver la película, podrá percatarse que aunque los nombres de la orden y de su líder fueron cambiados, la historia trata de mostrar lo que hasta nuestros días se sabe sobre ella; que el líder ejercía un poder absoluto, manipulaba psicológicamente a todos aquellos pertenecientes a la orden, consumía drogas, alcohol y violaba seminaristas.

La historia comienza con el reclutamiento del niño Julián (Sebastián Aguirre) en la orden de “Los Cruzados de Cristo”, quien siendo seminarista es tomado por el padre Ángel de la Cruz (líder de la orden interpretado por Juan Manuel Bernal), bajo su cuidado. Julián quien después será nombrado Sacramento Santos, es llevado de la mano del líder de la orden a desarrollar una obediencia perfecta mediante la manipulación psicológica y el chantaje.

La narrativa de la película no se sale de la historia real que hoy conocemos.

El guión no fue sorprendente. Y la película fue un tanto lenta, y sin una contraparte que le diera picor a lo que se contaba.

Las actuaciones en algunas ocasiones me parecieron sobreactuadas, ya que de cierta manera exageraron el ambiente religioso dentro del seminario, en el que la homosexualidad en los superiores fue tan marcada que causó un poco de risa. Sin embargo, la actuación de Juan Manuel Bernal, es bien lograda.

Desde un inicio fue bastante evidente lo que iba a suceder a lo largo del filme, pues se está tratando un tema delicado, en el que el abuso en todos los sentidos es el tema central de la película.

Por otra parte, la fotografía es buena, y me parece que el manejo de las escenas de abuso fueron trabajadas de una manera adecuada, por lo que las escenas eróticas de pedofilia quedaron a merced de la imaginación del espectador.


La película, no fue algo nuevo bajo el sol, y aunque no es excelente o sumamente interesante, tampoco es mala ni totalmente aburrida.